La Tomografía por Emisión de Positrones – Tomografía Computarizada, mejor conocida como PET-TC por sus siglas en inglés, es el aparato de imagen ideal para el diagnóstico principalmente de cáncer, así como para el seguimiento de su tratamiento; señaló el Dr. Jesús Uribe Moreno, Médico Radiólogo con especialidad en Radiología Inervensionista del Hospital San José de Querétaro.
El Dr. Uribe Moreno enfatizó que por medio del PET-TC se pueden realizar diagnósticos y seguimiento terapéutico de cánceres en cualquier parte del cuerpo como en huesos, mamas, pulmón o intestino, gracias a la tecnología aplicada con la combinación de radiofármacos.
El Dr. Jesús Uribe destacó que el PET es un método más completo que la Tomografía Axial Computarizada (conocida como TAC), debido a que las imágenes obtenidas son la fusión de esta última con la emisión de positrones, permitiendo un mapeo más específico del cuerpo y la posible ubicación de células malignas.
Explicó que este aparato utiliza los dos anillos, uno TAC y otro PET, logrando mejores resultados para el diagnóstico o seguimiento, por encima de otros estudios de imagen; específicamente por su precisión, lo que posibilita al médico especialista tomar una mejor decisión terapéutica.
Para poder hacer uso del PET-TC es necesario utilizar un radiofármaco, el cuál capta las células donde podría existir actividad mitótica o tumoral como el FDG (fluorodesoxiglucosa) que logra captar aproximadamente al 90 por ciento de los tipos de cáncer existentes con este estudio; aunque existen otros más específicos para diferentes casos.
Para realizar un estudio de PET-TC es necesario inyectar al paciente el FDG o el radiofármaco indicado, y esperar entre 40 y 60 minutos para alcanzar la mayor curva de efectividad de captación de células con actividad mitótica o tumoral en el cuerpo.
El especialista en Radiología señaló que por medio del radiofármaco, este escáner logra captar con colores los lugares donde existe esta actividad mitótica, emitiendo una serie de entre 3 mil 800 y 4 mil imágenes, corte por corte, las cuales posteriormente analizará el médico para poder definir el tratamiento a seguir.
Además, el estudio permite entregar un mapeo corporal de donde se encuentran las captaciones del radiofármaco.
Además de ser el auxiliar ideal para el diagnóstico de cáncer, el Dr. Uribe Moreno agregó que se puede realizar un PET funcional para la actividad renal, un PET funcional para la actividad pulmonar y últimamente incluso para un PET funcional para la actividad cardiaca.
El Dr. Jesús Uribe comentó que este estudio es generalmente derivado por otros médicos, generalmente Oncólogos, quienes tienen algún diagnóstico presuntivo de cáncer o bien los resultados de una biopsia que les permitió definirlo; a fin de poder definir las características de la actividad tumoral como su ubicación, tamaño o forma.
Lo anterior para tomar la mejor decisión en cuanto al tratamiento a seguir para el tratamiento del cáncer, sea farmacológico o quirúrgico.
Enfatizó que este no es un estudio que pueda realizarse el paciente por decisión propia, sino que tiene que ser solicitado por un especialista, debido a que existen riesgos al hacer uso de algún radiofármaco (al igual que cualquier otro tipo de fármacos), por lo que únicamente puede practicarse por indicación médica.
El Hospital San José de Querétaro cuenta con un PET-CT de gran calidad con un anillo TAC de 64 cortes, así como con un equipo de medicina nuclear calificado de acuerdo a la normativa oficial para la realización de este tipo de estudios, es decir, hay un especialista en medicina nuclear, un físico nuclear y un enfermero nuclear quienes practican y supervisan el procedimiento.
El Dr. Uribe Moreno destacó que además de las especificaciones técnicas y médicas de este estudio, de acuerdo a su experiencia, el nosocomio brinda un costo por debajo de muchos otros lugares donde también se realiza. Por ello, recordó que aquellos que por indicación médica deban realizarse un estudio de PET-CT, pueden acudir al área de Radiología e Imagen del Hospital San José de Querétaro, donde serán canalizados al departamento de Medicina Nuclear, que es donde se practica.